Antes de la llegada de los españoles, cuando los dioses caminaban entre los hombres y nada se movía más rápido que los pies de los corredores veloces del Anáhuac, la vida que conocían los nativos se vio de pronto sacudida por una serie de sucesos que, sin dudas, no auguraban nada bueno.
Las visiones de unas casas que flotaban sobre el mar, de un lago en llamas y los gritos aterrorizados de la Cihuacoatl fueron algunos de estos extraños acontecimientos y, sin embargo, hasta nuestros días se ha llegado el registro de ocho presagios que ciertamente dieron aviso de la llegada de la invasión de los europeos y el comienzo del fin del mundo mexica.
Según la tradición nahua, al menos una década antes de la llegada de los conquistadores a la América continental, estos 8 presagios se hicieron presentes en México-Tenochtitlán. Recopilados a través de la preservación de códices mexicas y las crónicas de entonces, conforman una historia que da cuenta de lo crudo que resultó para los pueblos originarios el proceso de dominio, subyugación y exterminio que significó la conquista.
¿Cuáles fueron las señales que alertaron a los pueblos del Valle de México antes de 1521?
1.- Una enorme espiga de fuego iluminó el cielo durante la noche
El avistamiento de un astro significaba tiempos de guerra, hambruna, enfermedad o el fin de un imperio. Los cometas eran portadores de malas noticias y en la cosmovisión de los pueblos nahuas, esta creencia no era la excepción.
2.- Un incendio incontrolable destruyó el templo de Huitzilopochtli
Se trata de una representación simbólica que expresa el significado de la conquista para los pueblos prehispánicos. El hecho de que el templo de la principal deidad mexica ardiera en llamas sin ninguna explicación resalta aún más con la imposibilidad de apagar el fuego: un designio trágico ante el que nada se puede hacer.
Esta interpretación es reforzada a partir del significado de las llamas para la iconografía náhuatl, asociadas a la destrucción y conquista de un pueblo sobre otro.
3.- Un rayo impactó en el templo de Xiuhtecuhtli en silencio y cuando apenas llovía
A diferencia de la mitología cristiana, la lluvia y el trueno suelen ser un símbolo de fertilidad, relacionado con Tláloc, el dios de la lluvia. El agua era un elemento abundante en la zona lacustre del Valle de México, sobre la que fluía la vida en Tenochtitlán y otros centros urbanos nahuas, razón suficiente para creer que tal acción no significaba un mal presagio y su interpretación estuvo influenciada por la mitología cristiana, que identifica la lluvia y tempestad como un castigo divino.
4.- Un gran fuego cayó durante el día y sembró miedo
Un cometa, se trata de una señal relacionada con una visión de Nezahuilpilli, quien fue consultado por Moctezuma para confirmar el presagio. El señor de Texcoco respondió sobre la catástrofe inminente según el Códice Durán:
” Y has de saber que todo pronóstico viene sobre nuestros reinos, sobre los cuales ha de haber cosas espantosas y de admiración grande; habrá en todas nuestras tierras y señoríos grandes calamidades y desventuras; no quedará cosa con cosa; habrá muertes innumerables; perderse han en todo nuestros señoríos, y esto será por permisión del señor de las alturas, del día y de la noche y del aire; de lo cual has de ser testigo y lo has de ver y en tu tiempo ha de suceder”.
5.- Una gran inundación azotó Tenochtitlán
Dicen que el agua hervía, que se desmoronaron las casas y se formó un lago.
Según Patrick Johansson K, este presagio pudo estar relacionado con la profecía de Tzuzumatzin, rey de Coyoacán en 1489, reinterpretada treinta años más tarde en el contexto de conquista e invasión de los pueblos originarios de América.
6.- Lamentos de una mujer que llora
El sexto presagio es detallado por fray Bernardino de Sahagún, quien personifica a la diosa Cihuacóatl como la mujer que llora en un contexto catastófrico donde las familias sufren la separación a causa de guerras e invasión. Una vez que Moctezuma se enteró de esta historia, ordenó que “si topasen a aquella mujer que dicen que anda de noche llorando y gimiendo, que le pregunten qué es lo que llora y gime”. Se trata del origen de una leyenda que tomó fuerza durante el periodo colonial y hoy forma parte de la tradición oral mexicana.
7.- La visión a través de los ojos de la garza
Una visión clara que articula tres elementos trascendentales sobre la visión nahua de la conquista: el supuesto espejo en la pupila del animal es una referencia a el tlachialoni (el mirador), un instrumento que en la mitología mexica poseía el dios del fuego, Xiuhtechutli. Los astros a los que se refiere, hoy conocidos como Pléyades, hacen referencia a la importancia que el cúmulo estelar tenía sobre los ciclos del fuego nuevo en la cosmogonía nahua.
Por último, la visión de los hombres que avanzan erguidos haciendo la guerra sobre venados es una alusión a los conquistadores y los caballos, entonces desconocidos para los nativos americanos.
8.- Apariciones de seres deformes.
El último presagio no solo hace una nueva alusión a los conquistadores montados sobre un caballo, también representa el choque cultural entre ambos mundos, producto bicéfalo de una visión desgarradora sobre los últimos años del pueblo mexica y la pérdida de sus costumbres y adopción de las extranjeras.
La conquista
La conquista de México es el gran suceso donde se somete al pueblo mexicano por los españoles para apoderarse de su territorio y de su población. Hernán Cortes desembarca en las costas de Cozumel en Ferrero de 1519 para así llegar posteriormente a Yucatán y de ahí proseguir su trayecto a Veracruz para continuar llegar al territorio Azteca donde es recibido por Moctezuma quien muere a manos de los españoles, le sucede en el trono Cuitláhuac quien muere rápidamente a consecuencia de viruela que fue introducida al nuevo mundo por los españoles y sube posteriormente Cuauhtémoc quien es hecho prisionero de los españoles para decir de los tesoros, esto significo la caída del gran imperio de Tenochtitlán en manos de los españoles y fue la pauta de inicio del periodo conocido como la colonia.