Alfonso Reyes

Es el pensador e intelectual, filósofo, poeta, ensayista, narrador, diplomático que mejor comprendió en su momento la trascendencia de difundir el conocimiento universal en México y América Latina y de vincular a México con el mundo.

Nació en Monterrey, Nuevo León, el 17 de mayo de 1889. En 1913, obtuvo el título de abogado en la Escuela Nacional de Jurisprudencia, de la Universidad Nacional de México.

Considerado uno de los escritores e intelectuales más destacados de la primera mitad del siglo XX. Cultivó casi todos los géneros literarios: la poesía, el cuento, la crítica, el ensayo y el teatro; así como la filosofía. Fundó el Ateneo de la Juventud, junto con Pedro Henríquez Ureña, Antonio Caso y José Vasconcelos, entre otros. Desempeñó diversos cargos en el servicio diplomático mexicano y fue varias veces candidato al Premio Nobel de Literatura.

Ocupó el cargo de secretario de la Escuela Nacional de Altos Estudios, antecedente de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM (1912-1913), allí fundó la cátedra de Historia de la Lengua y Literatura Españolas. Después de la muerte de su padre, durante la Decena Trágica, viajó a París, en agosto de 1913, para desempeñarse como segundo secretario de la Legación de México en Francia. En 1914, se trasladó a España, donde vivió como exiliado, tras el cese del cuerpo diplomático de Victoriano Huerta, dispuesto por Venustiano Carranza al triunfo del movimiento constitucionalista en México. En España, desde finales de 1914, se consagró al periodismo, a la literatura y, durante cinco años, trabajó en la sección de Filología del Centro de Estudios Históricos de Madrid, dirigido por Ramón Menédez Pidal. En esos años se relacionó con el medio literario español. Fue colaborador de planta de la Revista de Filología Española y, al fundarse el diario El Sol, de Madrid, figuró entre los redactores escogidos por José Ortega y Gasset. También colaboró en el Boletín de la Real Academia Española y en la Revue Hispanique, de Francia.

Entre 1919 y 1920, fungió como secretario de la Comisión Mexicana “Francisco del Paso y Troncoso”, destinada a investigaciones históricas en los archivos de Europa. Fue nombrado segundo secretario (junio de 1920) y primer secretario (enero 1921) de la Legación de México en España; encargado de Negocios ad interim de México en dicho país y delegado (con cargo honorario) de la Universidad Nacional de México en el Congreso Internacional de Sociología en Turín (1921). Se desempeñó como ministro plenipotenciario en misión confidencial para entrevistarse con el rey Alfonso XIII (1924) y, al término de su misión, viajó a Francia como ministro plenipotenciario, donde permaneció hasta 1927. Fue embajador de México en Argentina (1927 y 1936) y Brasil (1930). Regresó a México como presidente de La Casa de España en México (1939) y, posteriormente, fue presidente de El Colegio de México.

Entre su vasta obra destacan los libros Cuestiones estéticas (1911), Visión de Anáhuac (1917), Simpatías y diferencias (1921), Huellas (1922), Ifigenia cruel (1924), Pausa (1926), Cuestiones gongorinas (1927), Mallarmé entre nosotros (1938), La crítica en la edad ateniense (1941), La experiencia literaria y Última Tule (1942), El deslinde (1944), Norte y sur y Tres puntos de exegética literaria (1945), Los trabajos y los días (1946), Junta de sombras (1949), Cartilla moral, Marginalia y La x en la frente (1952), Memorias de cocina y bodega (1953) y Parentalia (1954), entre muchos otros. Tradujo obras de Laurence Sterne, Gilbert Keith Chesterton, Robert L. Stevenson y Antón Chéjov, por mencionar algunas. El Fondo de Cultura Económica ha publicado sus Obras completas en veintiséis tomos.

Recibió el Premio Nacional de Ciencias y Artes 1945, en el área de Lingüística y Literatura. Fue miembro correspondiente (1918) y de número (1940) de la Academia Mexicana de la Lengua, de la que también fue presidente (1957-1959); miembro de la Junta de Gobierno de la UNAM (1945-1948) y de la American Philosophical Society. Recibió el doctorado honoris causa por las universidades de California en Berkeley, Tulane, Harvard, Princeton, Yale, Pensilvania, en EUA; la UNAM y La Sorbona, de París, entre otras.

Alfonso Reyes Ochoa fue miembro fundador de El Colegio Nacional desde el 15 de mayo de 1943.

Falleció en la Ciudad de México el 27 de diciembre de 1959.

Fuente: El Colegio Nacional

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