Hace poco más de 5 años, el Ayuntamiento tomó una decisión contra el patrimonio de los guanajuatenses; optó por abrir la puerta a la urbanización de una zona de preservación ecológica.
La Bufa, Los Picachos, el Hormiguero y sus cerros aledaños conforman un corredor natural, el cual hasta la fecha mantiene su flora y fauna, no obstante, sigue el intento por urbanizar dichos espacios.