El equinoccio de primavera es un día cargado de simbolismo. Ya sea desde la ciencia, desde la magia, o quizá solo desde los sentidos, es un instante que no pasa desapercibido para ninguna conciencia ni cuerpo, y que es vital en más de un sentido.
Ocurre dos veces al año y es el momento en que tanto el día como la noche tienen la misma duración en todos los lugares de la Tierra.
La palabra equinoccio proviene del latín aequinoctium que significa “noche igual”.
Además, esta fecha marca el inicio de la primavera durante marzo en el Hemisferio Norte y es llamado “equinoccio primaveral”, mientras que en el Sur es “equinoccio otoñal”. Durante éste los días se acortan y las noches se alargan hasta inicios de junio.
Hay que empezar señalando que equinoccio, detalla la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), significa “igual- noche”, lo que hace referencia al instante en que la Tierra alrededor del Sol intercepta el Ecuador del cielo.
De acuerdo con Daniel Flores Gutiérrez, académico del Instituto de Astronomía de la máxima casa de estudios, con el equinoccio llega la primavera el cual es un “fenómeno universal que ocurre para toda la Tierra, lo único que cambia es la hora en cada país y se llama así porque, cuando sucede, la duración del día y la noche tiene un valor igual, es decir, de aproximadamente 12 horas”.
¿Por qué sucede?
Es durante esta fecha en que el Sol se encuentra de forma perpendicular al ecuador (la línea que divide a la Tierra en Hemisferio Norte y Sur) lo que ocasiona que el día y la noche tengan la misma duración en ambos hemisferios.
En el Polo Norte, este fenómeno de marzo da inicio a un día que tendrá seis meses de duración, mientras que el Polo Sur sucede lo mismo durante este tiempo, pero será de noche.
El equinoccio de primavera se origina con las antiguas civilizaciones, como son: los mayas, pueblo que existe desde hace más de tres mil 500 años, caracterizado a lo largo de la historia por su arquitectura, matemáticas, astronomías, así como sus 17 calendarios y edificios prehispánicos como es Chichén Itzá.
En el sistema maya se conoce un universo conformado por tres pisos: el cielo dividido en 13 niveles, la Tierra con cuatro rumbos diferentes y el inframundo con nueve estratos; el equinoccio conectaba con los tres niveles.
Por ejemplo el Sol, les simboliza la fuente de vida y la energía de la muerte, incluso cuenta la leyenda que contemplaban al astro “Kinich Ahau”, considerado un ser supremo por su relación con los tres pisos, además de su extensa relación con la naturaleza, más específicamente con el Kukulkán o serpiente emplumada, así como su templo Chichén Itzá, desde donde podía estar aún más cerca del Sol.
¿Cuándo sucederá en México?
En el hemisferio norte, el equinoccio de primavera suele ocurrir alrededor del 20 o 21 de marzo, mientras que el equinoccio de otoño suele ocurrir alrededor del 22 o 23 de septiembre.
De acuerdo con la información de EarthSky, este 2025 la primavera entrará de manera oficial en el hemisferio norte el 20 de marzo, que corresponde con los siguientes horarios:
- En la España peninsular, a las 10:01 horas de la mañana.
- En las islas Canarias, a las 09:01 horas de la madrugada.
- La UNAM menciona que el equinoccio de primavera ocurrirá el jueves 20 de marzo a las 3:01 horas.
Tras el equinoccio de primavera, la duración de la noche comienza a disminuir gradualmente, lo que da lugar a días más largos y luminosos. “Este proceso se invierte con la llegada del equinoccio de otoño, cuando las noches se alargan hasta llegar a su punto máximo durante el solsticio de invierno”, detalla la revista UNAM Global.
¿Por qué ocurre un equinoccio?
Los equinoccios ocurren por la inclinación de los ejes de rotación de los planetas mientras giran alrededor del Sol. La UNAM explica que no todos los planetas experimentan estos fenómenos naturales de la misma manera. Planetas como Mercurio y Júpiter poseen ejes de rotación casi verticales, lo que provoca que los días y noches tengan duración similar en Júpiter, mientras que Urano, que tiene una inclinación extrema, experimenta cambios drásticos en sus estaciones.
“En la Tierra y Marte, con sus ejes inclinados aproximadamente 23 grados, esta inclinación es responsable de las variaciones estacionales. Esto significa que, dependiendo de la época del año, un hemisferio recibirá más luz solar que el otro, lo que resulta en cambios en la duración de los días y las noches”, detalla.
Rituales del Equinoccio de primavera
Para recibir la primavera en México una gran cantidad de personas suelen acudir a las principales zonas arqueológicas del país, en donde se realizan diversos rituales para recargarse de energía.
En Chichén Itzá, por ejemplo, la pirámide de Kukulcán produce un juego de luces y sombras en donde aparece la serpiente emplumada de los Mayas, la cual desciende sinuosamente desde la cima —un fenómeno que suele atraer a miles de turistas—.
Por su parte, Teotihuacán también recibe abundantes turistas que acuden para darle la bienvenida a la nueva estación.
Sin embargo, este 2021 el equinoccio de primavera no podrá celebrarse así, puesto que ambas zonas arqueológicas permanecerán cerradas debido a las medidas preventivas ocasionadas por la actual pandemia.
Limpia
Durante el equinoccio es importante mover la energía, limpia y agiliza los flujos de tu hogar. Desecha o dona todo lo que no utilices, despeja las áreas de tu casa y asegúrate de tener tus espacios limpios y libres. Incluso puedes reordenar tus muebles para dar un nuevo paso a la energía.
Ritos con danzas
Para la abundancia es bueno recibir el equinoccio con ritos especiales. Una buena opción es acompañar tu mesa de desayuno con flores e incienso. Haz de cualquier acción un inicio especial.
¿Cómo se celebra el equinoccio de primavera en México?
En México, este fenómeno astronómico se celebra de diversas maneras, dependiendo de la región y las tradiciones locales. Algunas de las celebraciones más populares incluyen:
- Chichén Itzá. Miles de personas se congregan en la zona arqueológica ubicada en la península de Yucatán para presenciar el descenso de Kukulkán, un fenómeno de luz y sombra que se proyecta sobre la pirámide principal durante el equinoccio.
- Teotihuacán. En la zona arqueológica de Teotihuacán, muchos visitantes acuden a la Pirámide del Sol para recibir la energía del equinoccio y participar en rituales prehispánicos.
- Festivales y ceremonias. En diversas comunidades indígenas y rurales, se realizan eventos para celebrar el inicio de la primavera y agradecer a la naturaleza por sus dones.
Sitios arqueológicos para ver el equinoccio de primavera y cargarse de energía positiva
En la actualidad, existe la creencia de que en los centros ceremoniales prehispánicos se pueden “recargar energías” y restablecer el equilibrio con el cosmos al ascender a la cima de las pirámides durante este evento astronómico.
Según Francisco Granados, investigador de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, los edificios cívico-ceremoniales del México prehispánico, desde la aparición de la arquitectura monumental en el periodo Preclásico Medio, se orientaron hacia los puntos del horizonte donde el sol surgía o se ponía, las cuales correspondían a fechas significativas del año, como solsticios, equinoccios, pasos cenitales y otros eventos solares importantes dentro de la estructura calendárica.
Asimismo, el académico detalla que diversos estudios astronómicos en México han demostrado que algunas estructuras de la arquitectura cívico-ceremonial precolombina estaban alineadas con las posiciones del sol durante fechas específicas, como el 23 de marzo y el 21 de septiembre, es decir, los equinoccios de primavera y otoño.
Chichén Itzá: uno de los eventos más esperados durante el equinoccio de primavera es el fenómeno de luces y sombras que ocurre en el Templo de Kukulcán, ubicado en la zona arqueológica de Chichén Itzá, Yucatán. Según detalló la revista México Desconocido, este fenómeno, que tiene lugar durante los equinoccios de primavera y otoño, permite observar cómo la silueta de la Serpiente Emplumada, se forma en las escalinatas del templo. Este espectáculo, que dura aproximadamente 30 minutos, atrae a miles de personas cada año, por lo que es considerada una de las zonas más famosas y representativas para observar el equinoccio.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) informó que las taquillas de Chichén Itzá abrirán a las 7:30 horas, mientras que el acceso a la zona arqueológica comenzará a las 8:00. El cierre de taquillas será a las 16:00 horas, con el último ingreso permitido a las 16:30 horas, sin embargo, el desalojo del público se realizará entre las 17:30 y las 18:00 horas. Los costos de entrada para visitantes nacionales son de 100 pesos (cuota del INAH), más 198 pesos establecidos por la AAFY (Agencia De Administración Fiscal de Yucatán), que sumados dan un total de 298 pesos; mientras que para público extranjero es de 100 pesos, más 571 correspondientes a la AAFY, con un pago final de 671 pesos.
Teotihuacan: a unos 50 kilómetros de la Ciudad de México, la zona arqueológica de Teotihuacán es otro de los destinos más visitados durante el equinoccio. Según la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, esta antigua ciudad, conocida como el “lugar donde fueron creados los dioses”, destaca por sus monumentos de gran tamaño, entre ellos, las pirámides del Sol y la Luna y el Templo de Quetzalcóatl.
Para ver equinoccio, el acceso a Teotihuacán estará disponible de 8:00 a 17:00 horas, con el último ingreso permitido a las 16:30 horas. Los boletos tendrán un costo de 100 pesos, aunque el domingo la entrada será gratuita para visitantes nacionales y extranjeros residentes que presenten un documento probatorio. Además, durante este periodo, las puertas 1, 2, 3, 4 y 5 estarán habilitadas para el ingreso.
Dzibilchaltún: a solo 21 kilómetros de Mérida, en Yucatán, se encuentra Dzibilchaltún, una zona arqueológica menos conocida que Chichén Itzá pero igualmente fascinante. Según el Gobierno de Yucatán, este sitio es famoso por el fenómeno solar que ocurre en el Templo de las Siete Muñecas durante el equinoccio, donde alrededor de las 6:00 horas, el sol se alinea perfectamente con las puertas del templo, creando una imagen impresionante que marcaba para los mayas el inicio de la primavera.
El INAH informó que el primer acceso a Dzibilchaltún será a las 4:30 horas para observar este fenómeno en el Templo de las Siete Muñecas. Posteriormente, a las 8:00 horas, se abrirán el resto de las áreas de la zona arqueológica, que cerrará a las 17:00 horas. En este sitio, el costo de entrada será de 100 pesos, y solo se aceptarán pagos en efectivo.
Dzibanché-Kinichná: conocida como “Escritura sobre Madera” en lengua maya, fue una ciudad que floreció entre los años 300 y 1200 d.C. y que, hoy en día, sigue siendo un destino sagrado para quienes buscan conectar con la energía cósmica del equinoccio de primavera. Descubierta en 1927 por el arqueólogo Thomas Gann, quien la bautizó debido a los símbolos calendáricos grabados en madera que encontró en el Templo VI o Templo de los Dinteles, Dzibanché es un sitio cargado de historia y significado astronómico.
El horario de visita será de 8:00 a 17:00 horas, con restricciones en el acceso a algunas estructuras, por ejemplo, los templos 1 y 6 permitirán un máximo de 10 personas, mientras que la estructura principal de Kinichná estará limitada a 20 visitantes. En esta ocasión, el costo de entrada será de 80 pesos.
Zona Arqueológica de Cuicuilco: para los capitalinos, en la Ciudad de México, la zona arqueológica de Cuicuilco, considerada el primer centro ceremonial del Valle de México, también estará abierta durante el equinoccio. Según el INAH, el sitio operará en su horario habitual, de 9:00 a 17:00 horas, sin embargo, no se permitirá el acceso al basamento, los senderos ni al museo de sitio; únicamente estarán disponibles las dos explanadas. En este lugar, la entrada será gratuita.
Fuentes; El Financiero, Diario AS, Centenarios, UNO TV, National Geographic, Infobae.