Historia de la Campana de Dolores demuestra que es un símbolo de unidad nacional

El libro Historia de la Campana de Dolores, del maestro Alfonso Alcocer -única investigación en el tema- que incluye la crónica del traslado de Dolores a la Ciudad de México a petición de Porfirio Díaz, y el fervor patrio que cada 15 de septiembre manifiestan mexicanos en su país y en el extranjero, demuestran que este valiosísimo objeto merece tener la institucionalidad de símbolo nacional.

La Revista Centenarios, en esta edición, despliega textos de este libro con el propósito de que demos inicio a una cruzada nacional para convertir a la Campana de la Independencia en un símbolo patrio, además de la bandera nacional, del escudo y del himno, a fin de que la próxima legislatura local y federal la asuman como una iniciativa de ley.

La Campana de Dolores es un Símbolo Patrio que representa la expresión del Bicentenario

La campana de Dolores es la Campana de la Libertad que marca un inicio de un momento histórico nacional que despierta en la actualidad amor por la Patria y que arranca en todo mexicano el unísono el “Viva México”, como un sentimiento y una tradición popular… Es un símbolo que despierta respeto entre los mexicanos y ante sus autoridades. La unificación de la representación de la Campana de la Libertad y la reglamentación de su uso dará expresión de unidad nacional al proceso de la conmemoración del Bicentenario de la Independencia Nacional. La Campana de Dolores es la Campana de la Libertad que da expresión de reconocimiento institucional a un símbolo de un pueblo a 200 años del inicio de la Independencia Nacional.

A la Campana de Dolores la historia la ha puesto allí

La Campana de Dolores que está ubicada en el Palacio Nacional del país debe ser elevada al rango de símbolo Patrio. El trato que se le da a la campana dolorense en solemne, además de los reconocimientos que se le han hecho. En los Estados Unidos la Campana de la Libertad es visitada por 2 millones de gentes, al año, tiene un museo especial para su divulgación y conocimiento y esa sería otra posibilidad que se abriría con este tratamiento. En caso de que se autorice que sea un símbolo patrio sería el único elemento que no fue hecho expresamente para ello, sino que le toca el lugar que tiene de manera circunstancial. Actualmente hay una réplica de la histórica campana en el patio de la presidencia municipal de Dolores Hidalgo.

Antecedentes del Bicentenario

La jornada por la patria y la salida de la Campana de Dolores

En el año de 1985, al conmemorarse al 175 aniversario del inicio de la independencia de México y el 75 del comienzo de la Revolución, se llevó a cabo un programa de celebraciones consistente en diversos actos cívicos, a cargo de una comisión nacional creada por decreto presidencial. Como una de las partes más importante del programa, por su trascendencia, y con la cual se iniciaron las celebraciones fue la llamada “Jornada por la Patria”, en la que algunos símbolos de la nación recorrieron la República Mexicana.

El entonces presidente de la República Lic. Miguel de la Madrid Hurtado, el domingo 3 de febrero de 1985, hizo entrega a las fuerzas armadas de México representados por el secretario de la Defensa Gral. Juan Arévalo Gardoqui, de tres símbolos Patrios: la Campana de Dolores, la Bandera Nacional y el original de la Constitución de 1917. Esta ceremonia se verificó en el patio central del Palacio Nacional, en la que asimismo, el Presidente abanderó a la escolta que lo custodió en su trayecto por territorio nacional.

La Campana de Dolores bajada de su nicho la noche anterior por miembro del Cuerpo de Bomberos, encabezó a los símbolos en un vehículo especial que salió de Palacio Nacional ante la presencia de miles de capitalinos reunidos es la Plaza de la Constitución. El mismo día tres pernoctaron en las instalaciones del H. Colegio Militar y al siguiente día iniciaron a su largo recorrido que se prolongó durante 290 días, para concluirse en la capital del país el 20 de noviembre aniversario de la iniciación de la Revolución Mexicana.

De esta manera la Campana de Dolores fue conocida y homenajeada por el pueblo de México. Fue ésta la primera ocasión que no se escuchó un 15 de septiembre en Palacio Nacional desde su instalación ahí en 1896, pero nada mejor que sentir su presencia viva en toda la nación y volver oír su voz en su campanario original de la Parroquia de Dolores. La Jornada por la Patria permitió así al presidente Miguel de la Madrid, convertirse en el primer mandatario que hizo tañer la Campana de la Libertad en Dolores Hidalgo, al emular al Cura Hidalgo en los días patrios del mes de septiembre. Los habitantes de Dolores Hidalgo y México entero escucharon a 175 años de distancia, el mismo bronce que despertara a un pueblo aletargado, pero que ahora respondió a la manipulación de la cuerda con una sonoridad diferente. (Tomado del libro La Historia de la Campana de Dolores, de Alfonso Alcocer)

Son Símbolos Patrios expresión de identidad de los pueblos

Los símbolos Patrios son la máxima y genuina expresión de la identidad de todos los mexicanos. En ellos se resume el origen, la trayectoria y el devenir de la nación. Síntesis y crisol de las proezas de nuestros Héroes Nacionales, de la grandeza de nuestros antepasados y testimonio siempre vivo de la herencia de la fusión de las culturas que dieron origen al pueblo de México, los Símbolos Patrios concitan de manera perenne al respeto, a la veneración y a la emulación de las hazañas y las gestas, a la memoria de los acontecimientos que nos dieron un destino y marcan nuestro sendero hacia el futuro.

Cristalizan los ideales de un pueblo: Patricia Galeana

Como afirma Patricia Galena los símbolos nacionales <<…significan en el imaginario colectivo, la cristalización de los ideales de Independencia y Libertad. En una insignia, en un texto y unas notas se cohesionan los sentimientos de pertenencia a una tierra y a una comunidad, la de nuestros padres; que queremos como a ninguna otra, no sólo porque es grande sino porque es la nuestra. La patria es el país; el pueblo; la nación organizada jurídicamente en un estado; pero también un alma colectiva. >>

Y la devoción de un pueblo: Andrés Serra

El maestro Andrés Serra Rojas reflexionaba sobre el valor de los símbolos patrios, al expresar que: <<… son cosas vivas, ejemplo y sacrificio, cordura y reflexión, devoción por un pueblo y entrega total de nuestras vidas. Son conceptos actuales, inmediatos, que rigen todos los actos con sentido de responsabilidad. Se forman al calor de los acontecimientos históricos y luego el pueblo pone apasionadamente lo principal, que es su sentimiento, su emotividad, su razón implacable y su verdadera significación. La auténtica cantera de nuestra nacionalidad es el pueblo mismo, de su entraña surgimos y a él le debemos todo. Es nuestro progenitor, nuestro guía, que para soportar el angustioso camino de la vida, nos da sus creaciones, que son fortaleza, templanza, seguridad y fe en nuestro destino. Por eso estamos obligados a mantenerlos en su más diáfana expresión.

<< El símbolo tiene valor cuando anida en los más puros sentimientos y tradiciones populares (y)…coincidimos con nuestros símbolos para entender y querer a un pueblo, al que humildemente reconocemos que le corresponde por derecho propio, decir siempre y en toda ocasión la última palabra sobre su destino, y aún más, hasta forjar nuevos símbolos para mantener su supervivencia y la integridad de sus instituciones.

Reside en los pueblos su identificación

En estas dos opiniones que rescatamos tanto de la academia como de los debates parlamentarios, en torno al valor histórico, jurídico, político, cívico y social de los Símbolos Patrios, es en el Pueblo donde reside la identificación, veneración y respeto hacia aquellos símbolos que lo identifican con su propia esencia y destino. Identidad que se origina, nutre y proyecta n los hechos históricos que le dieron sentido y pertenencia como nación al pueblo mexicano.

Galena, Patricia. <<Los Símbolos Nacionales>> en Derecho y Cultura no. 13, Valores y Símbolos Nacionales, México, UNAM-Instituto de Investigaciones Jurídicas AMEDyC; enero-abril 2004.

Tomado de su intervención a favor del dictamen rendido por las Comisiones Unidas Primera de Gobernación y Segunda de Puntos Constitucionales respecto de la iniciativa presentada por el senador Rafael Murillo Vidal y la moción presentada por el senador Florencio Barrera Fuentes, relativo a adicionar una fracción al artículo 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, para facultar al Congreso de la Unión para legislar sobre las características y uso de los Emblemas Nacionales y el Himno Patrio, Diario de los Debates, Senado de la República, sesión celebrada el 10 de diciembre de 1965.

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