Identidad

Nuestra entidad como irapuatenses ha transitado por la Capital Mundial de las Fresas y la afamada Trinca Fresera de fĂștbol. Hoy, no tenemos tantas fresas aunque sĂ­ calidad. Hoy seguimos teniendo estadio pero no fucho de primera divisiĂłn. Como irapuatenses debemos de apostarle a una identidad y esta identidad, por lo que vemos, Irapuato es una ciudad anfitriona, con brazos abiertos al mundo. Esta debe de ser la irapuateidad: una ciudad hermana, la casa de todos, que brinde seguridad, armonĂ­a en sus avenidas y bienestar a propios y a visitantes, que son una gran poblaciĂłn flotante.

En el tiempo, con el mercado de la fresa que se construye, seguiremos apostando por la calidad para ser la Capital Mundial de la Fresas para siempre. Como empresarios y como sector turĂ­stico, estamos contribuyendo para volver a tener equipo de fĂștbol, para lo cual estamos sosteniendo reuniones para intentar conciliar con las partes y estamos en busca de inversionistas que le apuesten a un equipo de primera divisiĂłn.

Las glorias pasadas de la Trinca nos motivan a ser una voz en el desierto: decir a los empresarios nacionales que sueñen con la Trinca Fresera del Irapuato y sueñen porque tenemos estadio y tenemos una gran afición, una afición que son de abuelos, de hijos y de nietos.

Los abuelos, siendo jĂłvenes, fueron freseros de corazĂłn en aquellos grandes partidos con los goles del MĂ©dico Reyes. Con las grandiosas jugadas del Bobo Madrigal, de tantas y tantas historias con estadios llenos.

Los periódicos de la época. Los cronistas de la época, como El Rifeño y otros, enloquecieron y enloquecían a la afición entera cuando la Trinca Fresera del Irapuato les sacaba de la bolsa el triunfo a uno y a otro equipo.

El América, el León, las mismas Chivas del Guadalajara se cuadraban con nuestro equipo azulgrana de la Trinca, porque era un equipo de respeto y una afición de respeto.

SerĂĄ un milagro el que los empresarios en disputa se pongan de acuerdo para que lleguen mĂĄs empresarios y regrese el fĂștbol de primera divisiĂłn que tanto anhelamos. Por eso, que este escrito sirva de exhorto a que le den un regalo a la aficiĂłn.

Mientras soñamos con el fĂștbol de primera divisiĂłn, somos testigos del formidable trabajo que lleva a cabo la administraciĂłn del Arq. Ricardo OrtĂ­z GutiĂ©rrez, en el caso especĂ­fico de la Copa Comunidades, que a manera de prevenciĂłn convoca a jugadores de las comunidades rurales de Irapuato a torneos futboleros.

Un grupo de empresarios estamos interesados en el resultado final de este primer torneo para determinar si les buscamos patrocinios a estos jĂłvenes con talento deportivo, para que puedan continuar en esa ruta del triunfo.

Sabemos del talento de mĂĄs jĂłvenes en Irapuato. A ellos tenemos que ponerles atenciĂłn. A los jĂłvenes debemos de decirles que hay metas saludables, como ser exitosos en muchas disciplinas.

Esta debe de ser una identidad: un Irapuato de brazos abiertos al mundo para ser exitosos. Y todo esto se entiende si tenemos pasiĂłn por Irapuato.

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