En 1689, se le había otorgado a Irapuato el permiso real para verificar las tandas (ferias o mercados), por lo que en 1731 se celebran cada 6 meses durante 8 días. Hasta 1894, se realizó la primera feria, donde Irapuato estrenó su rango como ciudad, esta se realizó en la Calzada de Guadalupe.
En 1864, durante la visita del emperador Maximiliano a la ciudad de Irapuato, ordenó que la Fiesta del Puente “La Feria” se realizara con orden y proyección. Así fue creada una Junta de vecinos que se encargaría de organizarla, por lo tanto Maximiliano es considerado como el padre de la Feria de Irapuato.
La feria del año de 1900 no se realizó en enero sino hasta el 23 de febrero, día en que se inauguró el alumbrado eléctrico en la ciudad.
A partir de 1900, el aniversario de la fundación de la Ciudad y la feria se festejaron con regularidad en la ciudad, algunas veces en la Calzada de los insurgentes y otras en la Alcaldía, salvo durante el periodo revolucionario donde Irapuato se volvió un paso obligado de las tropas.
Feria de las Fresas
Febrero 15 de 1947
Celebraciones por los 400 años de la Fundación de Irapuato
Para celebrar los 400 años de la fundación de Irapuato, se estableció la primera Feria de las Fresas, donde se desarrollaron diferentes eventos artísticos.
Febrero 6 de 1963
Inauguración de la Feria de las Fresas por el gobernador del Estado
Fue inaugurada la tradicional Feria de las Fresas por el gobernador del Estado de Guanajuato, Juan José Torres Landa. Se presentó nuevamente la exposición industrial y comercial, en los terrenos del fraccionamiento Jardines de Irapuato, que constituyó la exhibición más completa de producción industrial de la ciudad el estado y del centro del país.
En ese año fue coronada como Reina de la Feria de las Fresas la señorita María Elena Cazares.
La feria de 1966, alcanzó files internacionales, pues participaron las embajadas de Japón, Estados Unidos y España, países que mostraron adelantos industriales, arte y su cultura.
Hasta el año de 1975, la feria contó con su propio terreno en el antiguo predio de La Virgen, conocido posteriormente como Parque Hidalgo. Y ahora se llamaba Expo Fresas.
Marzo 2 de 1975
Inauguración de la Expo Fresas
Ante una multitud ávida de alegría hambrienta de espectáculos y de diversiones, teniendo la participación de cientos de expositores se inaugura la Expo-Fresas. El cielo de Irapuato se llenó de fuegos artificiales y la banda municipal tocaba las notas de “Tierra de mis Amores” bajo la batuta del maestro Margarito Olmos.
La Reina de la Expo-Fresas fue Mary Cruz Balboa.
El nacimiento de una feria
Por: Sebastián Martínez Castro
La tarde del 22 de noviembre de 1971, el entonces Presidente Municipal de Irapuato, Don Fernando Díaz Durán (q.e.p.d), me citó en sus oficinas para pedirme que presidiese el Comité de la Octava Feria de las Fresas. En contestación respondí que sí, siempre y cuando acudiese a desayunar en casa de mi madre, la Sra. Melania Castro de Martínez. Don Fernando, que presumía de no tomar alimentos por la mañana, aceptó de buena gana. Al día siguiente, ya en casa de mi madre, menuda sorpresa se llevó al encontrarme a mí y a otros dos invitados: el Arq. Carlos Toriello del Collado y al Arq. Manuel Solórzano Soto; los tres planos en mano y regla de cálculo al canto y dispuestos a librar la batalla para conseguir unas instalaciones permanentes. Don Fernando, con aquella filosofía tan especial, se dirigió a mi madre y le dijo: “Doña Mela, yo vine a almorzar y no a trabajar…” y aquel gran político (que nunca desayunaba) le entró a los chilaquiles, a los huevos al albañil, a las puntas de filete y a los tamales. Ya en el café le dijo a mi madre: “Gracias por este almuerzo y por su compañía. Ahí le dejo en custodia a estos jóvenes para que trabajen todo el día. ¡Ah! Y me los manda por la noche a mi oficina…”
Así nacieron las raíces de Expo Fresas. El comité realizó, por primera vez: la planificación técnica de la feria; creó el organigrama de funciones y reclamó la participación de irapuatenses de buena fe y dispuestos a entregar su tiempo en pro de Irapuato. Se pidieron prestados los terrenos frente al monumento de Don Benito Juárez, el cual, por cierto, es el resultado de la promoción que ante las autoridades municipales llevaron a cabo el comité. Se adquirieron las estructuras metálicas y equipo, los cuales, tres años más tarde, fueron la base económica para la futura y definitiva exposición. Es importante hacer notar que las instalaciones de la Octava Feria de las Fresas dieron vital auxilio a miles de damnificados de la inundación de 1973.
Dado el nulo interés de las nuevas autoridades electas por adquirir los terrenos donde se celebró la feria durante tres años consecutivos, los propietarios de los mismos nos notificaron, en diciembre de 1974, que tendríamos que retirar las estructuras, fuentes y oficinas del área hasta entonces facilitada porque la misma ya había sido vendida.
*Se tomó el toro por los cuernos y se creó el Patronato Pro Construcción del Parque Hidalgo, A. C., cuyos objetivos fueron: “La construcción de la exposición y feria de Irapuato, bajo el nombre de Expo-Fresas, y, en último término, la erección de un parque de diversiones para la ciudad…” Así, el 6 de enero de 1975, previo anticipo y aval del Presidente del Patronato, así como el del Tesorero, Don Marcelino Balboa Pérez, se adquirieron doce hectáreas de terreno. El 15 del mismo mes se iniciaron las obras. Se trabajó sin desmayo tres turnos… El dinero siempre escaseaba… Los stands se vendían, a lo largo y a lo ancho de la República, bajo promesa de terminación mediante un simple plano, obligándose, el Patronato, a regalar el espacio si no se concluían las instalaciones una semana antes de la inauguración, evento que tendría lugar escasos a escasos dos meses y medio de haber sido comprado el solar… Se convenció, y obligó amistosamente, al dueño del palenque a invertir… Para cumplir con el jardín del automóvil tuvo que adquirirse aserrín, el cual se pintó de color verde… Marcelino Balboa, Salvador Rea, Gustavo Ramírez, Manuel Solórzano, Fernando Michel, el Gral. Antonio Barba, Comandante de la XVI Zona Militar y Vice-Presidente del Patronato, Juan Irastorza y el que escribe, así como otras personalidades que escapan a mi memoria, veíamos con desesperación el correr de los días, a la vez que contemplábamos a corriente continua de visitantes, algunos apostando en contra, otros a favor: “¡Voy tanto a que no terminan…! “¡Voy tanto a que si…!”; y los menos, los pesimistas de siempre, quienes aseguraban: “¡No va a asistir gente…! ¡Será un fracaso!”
Por fin el 2 de marzo de 1975, ante una multitud ávida de alegría, hambrienta de espectáculos y de diversiones, y con la participación de cientos de expositores se inauguró la Expo-Fresas. Esa noche los cielos irapuatenses fueron salpicados con estrellas artificiales y con cometas y fuegos de colores, mientras la banda municipal, bajo la batuta del maestro Margarito Olmos, acariciaba los oídos de los concurrentes con las notas de “Tierra de mis Amores”.
Pasaron los años y la obra prosiguió… La Presidencia de la Expo Fresas pasó a manos de Gustavo Ramírez; posteriormente tomó el mando Enrique Páramo. El presidente fundador seguía presidiendo el Patronato del Parque Hidalgo… En diciembre de 1985, una vez cumplido el objetivo a largo plazo: inquietudes de otros ciudadanos. Un año después, en marzo de 1986, a un año de distancia de su terminación, fue inaugurado el sueño hecho realidad de algunos irapuatenses.
En algún lugar de los cimientos de la hermosa obra permanece un cilindro de hacer perfectamente sellado. En su interior, si el tiempo no los ha dañado, se encuentran los nombres y las firmas del Patronato inicial, así como las cifras y datos de los hechos de aquí se han relatado.
Con información de Grupo Editorial Centenarios – Kiosco de la Historia.
