Romualdo García es reconocido como uno de los mejores fotógrafos de retratos de América Latina de finales del siglo XIX y principios del siglo XX.
Nació en Silao, Guanajuato, el 6 de febrero de 1852.
Fue llevado por su madre a la capital del estado, donde ingresó a la Escuela de Artes y Oficios. Estudió pintura y música, convirtiéndose en músico de profesión por varios años.
En la década de los 80 se inició en la fotografía y a partir de 1887 abrió públicamente su estudio, ubicado en Cantarranas núm. 34, en el primer cuadro de la ciudad.
Retrató a todos los sectores de la población guanajuatense: niños, hombres, mujeres, ancianos, gente con niños muertos, etcétera. Así, se convirtió en su fotógrafo por excelencia.
Romualdo gustaba de dirigir la captura en sus fotografías y no se limitaba a capturar el momento, si no que proponía miradas, poses y vestuarios.
La tradición de capturar una imagen de los familiares fallecidos, cobró popularidad en todos los estratos de la sociedad e indiscriminadamente de tal circunstancia, García dotaba de naturalidad y elegancia sus tomas.
Dada la tasa de mortalidad de aquellos tiempos, donde la edad promedio de vida no rebasaba los 40 años y la gran parte de los infantes moría en los primeros 5 años de vida, muchas de las imágenes correspondían a niños.
Dichas imágenes se conocían como “Los Angelitos”, con quienes debido a su estética refinada, se podía lograr una imagen dulcificada de la muerte y a través de una serie de técnicas se buscaba capturar a los familiares buscando un recuerdo permanente.
Participó en concursos nacionales e internacionales, como el de la Exposición Universal de París en 1889, en el que se otorgó la Medalla de Bronce por su trabajo.
Once años después, la misma exposición le entregó dos medallas y dos diplomas, mientras también fue premiado en la ciudad de México y en León, Guanajuato.
El Fondo Romualdo García compuesto por su obra (colección que da origen a la Fototeca), consta principalmente de retratos de gelatina sobre vidrio de entre 1906 y 1914.
Falleció en el año de 1930. Su obra fue redescubierta hasta 1978, cuando comenzó la investigación sobre su rica colección de imágenes, que son un testimonio visual excepcional para la herencia de su país.
Fuentes: México Desconocido, Fotofestín, Milenio.