La ciudad de Guanajuato es una de las más bellas. Desde hace casi 30 años tiene el nombramiento de ciudad patrimonio y resguarda en sus espacios historias de riqueza y lucha; monumentos históricos y calles pintorescas.
Aquí te presentamos 6 lugares históricos de esta colonial ciudad:
1.-Teatro Juárez y sus musas
La idea de construir el Teatro Juárez fue del gobernador liberal Florencio Antillón, quien, oficialmente decretó su construcción en 3 de agosto de 1872.
Su construcción se inició el 5 de mayo de 1873. Es decir, que la idea y el diseño originales de la obra fueron liberales, pero fue el gobernador porfirista Joaquín Obregón González quien la inauguró. El Costo total de la obra fue de 559 447.88 pesos de la época. Fue inaugurado el 27 de octubre de 1903, a la que asistió el presidente Don Porfirio Díaz. A las nueve en punto de la noche comenzó la función. Primero, María Estrada cantó el Himno Nacional, acompañada de un coro de señoritas, y luego, se representó Aída, con libreto de A. Ghislamzoni y música de Giussepe Verdi. Esta estuvo a cargo de la Compañía italiana Ettore Doig y Cía., cuyo director artístico era Napoleone Sieni, y su director concertador, Giorgio Polaco.
Su pórtico es de estilo neoclásico y el decorado de la sala árabe o morisca, empleándose en profusión la escritura gótica y la cursiva combinada con motivos vegetales y geométricos, haciendo del conjunto el decorado más fastuoso que ostente teatro alguno en todo México.
La fachada está formada por 12 columnas de cantera verde rematadas con capiteles de bronce estilo dórico.
Rematando el bello y señorial frontispicio se encuentran ocho estatuas fundidas en bronce, cinco de ellas son representativas de las nueve musas. Situándose al frente del teatro, vemos en el lateral izquierdo a Terpsícore, la musa de la danza, la segunda al frente es Talía, la musa que representa la comedia; la que sigue, de izquierda a derecha es Calíope, musa de la poesía épica. La cuarta sostiene una antorcha levantada, un libro y representa la comedia; la quinta sostiene un pincel y una paleta y representa la pintura; la sexta es Melpómene, musa de la tragedia; la séptima es Euterpe, musa de la música; la octava colocada en el lado derecho representa a la escultura.
2.-Universidad de Guanajuato y sus escalinatas
En el siglo XVIII llegaron a Guanajuato los jesuitas Mateo Delgado, José Redona, Bernardo Lozano, Diego Camarena y José Volado, y el 1° de octubre de 1732 establecieron el Hospicio Escuela de la Santísima Trinidad. Hospicio que a la cuenta del tiempo sería la nacional e internacionalmente reputada Universidad de Guanajuato. Esta institución que se estableció en la finca donada por Doña María Teresa de Busto y Moya, actualmente rodeada por construcciones, tiene ahora varios edificios en diversos puntos de la ciudad y el Estado.
La adaptación de la casa para fines escolares se inició en 29 de octubre de 1759 y concluyó en 1761.
Posteriormente fue destinado a la institución pública mediante el Decreto del 29 de agosto de 1827, expedido por el Congreso del Estado. Con este fin fue ampliado y reinaugurado por el Primer Gobernador del Estado, Lic. Carlos Montes de Oca.
Recibió la denominación oficial de Colegio del Estado en 1858 y a partir de 1955 pasó a constituirse en Universidad de Guanajuato.
El edificio central ostenta el aula magna la cual de acceso la escalera monumental, este conjunto es una sinfonía de colores de las canteras de Guanajuato. En el interior se encuentra dos capillas de los siglos XVI y XVII, y constituyen actualmente al salón del Consejo y la biblioteca Lic. Manuel Cervantes. Anexo al edificio se encuentra el que fuera convento de los jesuitas, antes escuela de Relaciones Industriales y hoy centro de exposiciones, ostenta bellísimas fachadas del siglo XVIII; este patio con sus arcadas, sus escalinatas, sus balaustradas, sus fachadas y cúpulas de la Compañía, hacen uno de los conjuntos arquitectónicos más soberbios de Guanajuato.
3.-Callejón del beso y su leyenda
Es admirado por su rara estrechez que lo hace verdaderamente único.
Los balcones de dos casas, uno frente al otro, separados por sólo 68cms, dan origen a la romántica y trágica leyenda: la única hija de un padre intransigente era cortejada por un muchacho, pero al ser descubierta la relación, el padre la encerró en una de las casas. El apasionado enamorado decidió comprar la casa de enfrente, sabiendo que asomado a su balcón podría tocar y hasta besar a su enamorada. Al parecer, el padre los descubrió y acabo matando a la muchacha. Sin embargo, la leyenda también afirma que las parejas que se besan en el tercer escalón de la escalera entre ambas casas tienen garantizados siete años de felicidad.
4.-Plaza del baratillo y su fuente
Debe su nombre al tianguis que antiguamente se instalaba los domingos, en el que los comerciantes pregonaban lo barato de sus mercancías. Tiene en el centro una bella fuente florentina, que se dice fue obsequio de Maximiliano a la ciudad. Esta fuente, la más bella de la ciudad, se encontraba en la Plaza Mayor y fue donde brotó por primera vez agua entubada de la Presa de la Olla, este acontecimiento tuvo lugar el día dos de junio de 1852.
5.-Jardín de la unión y su kiosco
Este pequeño jardín es, con mucho, el de más tradición, el de más arraigo, el de más abolengo en Guanajuato; su plantación principia en el mes de agosto de 1836, en lo que antes se llamaba la Plaza de San Diego; pero no es sino hasta octubre de 1861 cuando adquiere el título de Jardín de la Unión, transformándose en el lugar más frecuentado de la ciudad. El 16 de septiembre de 1883 se estrenó el kiosco y se encendieron por primera vez en Guanajuato lámparas de luz eléctrica.
Es un bello parque triangular con el kiosco al centro y un fresco techo de árboles que le dan un ambiente muy agradable. Los domingos, martes y jueves por la noche, se alegra con la música de la Banda del Estado y otros grupos.
6.-Mina de la valenciana
El hallazgo más importante de tan rica ciudad de Guanajuato, minera por excelencia, fue sin duda la Mina de la Valenciana, nombre dado por el origen de los abuelos del que descubriera dicha mina, quienes habían nacido en la provincia de Valencia, España, Don Antonio de Obregón y Alcocer.
Por el año de 1769, la suerte y laboriosidad es premiada con el descubrimiento de la mina más rica del mundo, jamás igualada hasta nuestros días. El criado y compañero de tan gran descubrimiento, Juan Bautista Pérez, fue premiado, pues se comprometió Don Antonio de pagar 6 pesos por semana de por vida. La riqueza de la mina era tan grande que alcanzaba 50 metros de diámetro la veta, tan rica en plata y oro que producía 189 barras de plata y 5 de oro en un mes, cantidad extraordinaria tomando en cuenta los instrumentos tan rudimentarios con que se realizaba la explotación. Es de llamar la atención que en la época de bonanza, las 2/3 partes de plata que circulaba en el mundo salían de sus entrañas.