Tras el sismo de la madrugada del sábado 4 de septiembre en San Felipe, Guanajuato, causó afectaciones en la antigua hacienda de Jaral de Berrio. Provocando que la cabeza del conde que se ubica arriba de ésta, se cayera a causa del movimiento.
Fue a través de las redes sociales que los habitantes del lugar compartieron fotografías de los daños, como el Conde sin cabeza, así como la cabeza de piedra recuperada y resguardada, aunque por el impacto sufrió severos daños.
De acuerdo a los reportes por parte del Servicio Sismológico Nacional se registró un sismo de 4.5 grados.
Historia de la Hacienda Jaral de Berrio
Ubicada en el noreste del Municipio de San Felipe, Gto. a 36 km de la cabecera municipal por la carretera a San Luis Potosí, la Hacienda de San Diego de Jaral de Berrio se constituye como una de las haciendas más grandes, antiguas, y por lo tanto, de las de más largo historial de nuestro país.
Su origen se remonta hacia los finales del siglo XVI, periodo en el que Juan de Zavala, español avecinado en las minas de San Luis Potosí se hace de varios sitios ganaderos en el entonces valle de San Francisco, terrenos a los que bautiza con el nombre de Hacienda de Zavala a la que, posteriormente, anexa otro sitio para ganado menor y cinco caballerías de tierra que el Virrey Juan de Mendoza y Luna le otorga en 1607.
Tras varios traspasos, heredades y anexiones, nos encontramos que a mediados del siglo XVIII, los propietarios de la, para ese entonces llamada Hacienda de San Diego del Jaral (ya que así se le conocía al paraje), eran Doña Teresa Josefa Zaldívar y Retes de Paz y Vera y su esposo el Capitán Andrés de Berrio y Díaz Palacios Ortíz de Landázurri y Ayala, quienes al morir dejan como beneficiario de todos sus bienes a su hijo Miguel de Berrio y Zaldívar, quien en 1774 es nombrado Primer Marqués del Jaral por el Rey Carlos III, y es él a quien se le debe que se le agregue el de Berrio, al nombre de la propiedad.
El Primer Marqués de Jaral, Miguel de Berrio y Zaldívar, en 1749 llegó a ser dueño de 99 haciendas, siendo la de Jaral la más importante de ellas y algo así como la capital de un “pequeño” estado. Con él se iniciaron las ventas de productos agropecuarios de la hacienda en otras poblaciones, incluyendo México.
Los años siguieron pasando y la bonanza continuó para este lugar Juan Nepomuceno de Moncada y Berrio, tercer marqués de Jaral de Berrio, fue el hombre más rico de México en su época y uno de los mayores terratenientes del mundo según Henry George Ward, ministro inglés en 1827. Se cuenta que este marqués tuvo 99 hijos y a cada uno de ellos le regaló una hacienda.
¿Quién fue el Primer Marqués de Berrio?
Su nombre completo es Miguel José Calixto de Berrio y Saldívar Ortiz de Landázuri Retes Palacio Paz Ayala y Vera. Era hijo de Andrés de Berrio (1669- 1747) y de Teresa Josefa de Saldívar (1680-?), heredera de la fortuna de Dámaso de Saldívar, sobrino del apartador de oro y plata, el capitán José de Retes Largache (1623-c. 1687), de quien también heredó su fortuna. Miguel contrajo nupcias en abril de 1750, con Ana María de la Campa Cos y Ceballos, II condesa de San Mateo Valparaíso. Su única hija Petra María Guadalupe de Berrio (10 de febrero de 1752-8 de marzo de 1803) casó con Pedro de Moncada Aragón, Branciforte y Platamone, marqués de Moncada y Villafont, de los príncipes de Larderia y Rosolini, coronel del Regimiento de Dragones de Puebla y caballero de la Orden de San Juan de Jerusalén.
Miguel de Berrio fue alcalde y corregidor de la Ciudad de México. Colaboró como contador mayor del Real Tribunal de Cuentas hasta abril de 1757 en que se le concedió su jubilación con honores, reconociéndole como ministro del Consejo Real de Hacienda. Fue rector (1755-1756) y diputado de la Cofradía de Aránzazu.
Se distinguió como empresario agrario y minero. Explotó minas en Guanajuato, Querétaro, Nueva Galicia y Nueva Vizcaya. Dueño de numerosas haciendas, entre éstas: San Diego del Jaral, El Huizache, San Miguel, Carboneras, Lobatos, Nuestra Señora de los Dolores, San Mateo, Santa Ana, La Sauceda, San Antonio, Escolástica, San José de Cabras, Deseadilla y Zapatilla, algunas próximas a la Villa de Guadalupe y otras en el Bajío, en las inmediaciones de San Miguel el Grande. Se preciaba de poder trasladar sus ganados, desde Durango a Cuautitlán, sin pisar tierra ajena.
Nombramientos y títulos:
Fue cruzado caballero de la Orden de Santiago (1772) y miembro benemérito de la Real Sociedad Bascongada de los Amigos del País (1773). Le fue concedido el título de marqués de Jaral de Berrio, con el vizcondado previo de Santa Ana y San Miguel, el 18 de diciembre de 1774, en atención a los numerosos servicios que él y sus ancestros habían proporcionado a la Corona, entre éstos, el sostenimiento de la tropa en el movimiento popular de 1777 y en los estados de guerra contra Inglaterra.
Fue mecenas del matemático y literato José Ignacio Bartolache, editor del Mercurio Volante, periódico científico literario, quien en 1772 obtuvo los grados de licenciado y doctor bajo el patrocinio de Berrio. Encomendó a Francisco Guerrero y Torres, reconocido arquitecto novohispano, las construcciones de su palacio y el de su hija, monumentales edificios que aún se conservan en la ciudad de México.
Miguel Berrio y Saldívar es representativo de los herederos de familias cuya fortuna se inició en el siglo XVII a través de la producción agraria y explotación minera en Zacatecas y San Luis Potosí. Ejemplo de los criollos poderosos que a la par de la administración de sus cuantiosos bienes agrarios y producto de la explotación minera, participaron como funcionarios de la Monarquía española, siguiendo la tradición de sus ancestros.
La hacienda durante los movimientos armados en México
Para el año de 1810, Juan Nepomuceno de Moncada y Berrio, nieto del Primer Marqués, era el propietario de la hacienda y se une al cura Hidalgo en la lucha insurgente pero cuando las fuerzas reales de Calleja llegan a la finca, el Segundo Marqués del Jaral se pasa de su lado y forma el Regimiento Moncada para defender sus dominios. El 7 de Julio de 1817, Francisco Javier Mina toma la hacienda y, al finalizar la lucha armada, el entonces emperador Agustín de Iturbide, nombra a Juan Nepomuceno Caballero de la Orden Imperial de Guadalupe, motivo por el que pronto repara los daños causados a sus propiedades.
Para 1855, el casco de la hacienda estaba poblado por cerca de 6500 habitantes, además de que contaba con oficinas de Alcabalas y Correos, con dos escuelas de primeras letras, dos mesones públicos y su capilla había sido elevada a Parroquia y, para 1890, el Ferrocarril Nacional Mexicano contaba con 2 estaciones dentro del Jaral y era propiedad de Juan Isidro de Moncada Berrio Hurtado de Mendoza.
Lo último que se conoce acerca de los propietarios de la hacienda es que “Doña Margarita”, nuera de Juan Isidro, vendió la hacienda al señor Rutilo Rojas Rodríguez, cuando aún contaba con 5000 ha.
Atractivo turístico
Cada uno de los propietarios le fue agregando construcciones a la hacienda, y cabe decir que son estos contrastes arquitectónicos los que la hacen más interesante. En algunos casos, fueron los trabajadores los que con sus ahorros pusieron su granito de arena. Así sucedió con una de las armas de llaves de la hacienda que por esfuerzo propio empezó a levantar la iglesia dedicada a Nuestra Señora de la Merced en 1816. Después, como un anexo a la misma, don Juan Nepomuceno levantó una capilla de enterramientos para él y su familia.
En el interior, la hacienda está tapizada de imágenes grabadas con figuras humanoides y un sinfín de simbología en techo, paredes y puertas.
Otro gran atractivo que tiene este lugar es la realización y comercialización de mezcal, sus tierras áridas son las mejores para producir esta rica y potente bebida ya que la hacienda “San Diego del Jaral” es la primera casa de la Nueva España que recibió una Cédula Real la cual autorizó la producción de esta bebida alcohólica.
Películas grabadas en la Hacienda
La hacienda ha sido reconocida a nivel nacional como internacional, pues en ese lugar se han filmado algunas películas, entre ellas: “Once Upon At Time” protagonizado por actores como Johnny Depp, Salma Hyek y Antonio Banderas; “Pancho Villa” protagonizada por Antonio Banderas y alguna otra producción mexicana.
Fuentes: El Sol de Irapuato, Milenio León, Ruelsa, México Desconocido, Real Academia de la Historia.
Fotografías: El Sol de Irapuato, Milenio León.